Espacio de Lectura y Espacio de Dibujo
Sala 1 y Sala 2, Centro Cultural Recoleta. Buenos Aires
Inauguración: enero de 2017
Idea y diseño: estudio a77 (Gustavo Diéguez y Lucas Gilardi)
Producido en CHAco por Loli Mallea.
Publicado en:
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Espacio de Lectura y Espacio de Dibujo
Sala 1 y Sala 2, Centro Cultural Recoleta. Buenos Aires
Inauguración: enero de 2017
Idea y diseño: estudio a77 (Gustavo Diéguez y Lucas Gilardi)
Producido en CHAco por Loli Mallea.
Publicado en:
Espacio de lectura.
Es un lugar destinado al acto de leer. Un conjunto de mobiliarios se alojan contenidos en los arcos del
antiguo convento rodeando al Patio de Naranjos que así recobra un uso para la lectura al aire libre y como
lugar de encuentro y reposo.
El cobijo bajo un arco en un micro espacio es el intento de reconstrucción de una imagen, una figura evocada
por la pintura clásica, que condensaba la idea de la lectura como aquella que nos permite habitar la construcción
de un mundo. Así habitamos esta sala, que por mucho tiempo fue lugar de exposición temporaria.
Es además un espacio para el encuentro con los otros en la ciudad, escritores y lectores, un encuentro para compartir
historias y experiencias con la palabra.
Los muebles llevan ruedas para poder moverlos con facilidad y emplazar otras configuraciones que se complementan
con un juego de reposeras y cajones guarda-libros.
En cada temporada diferentes grupos de escritores se encargarán de seleccionar un conjunto de los libros de su
preferencia que, de esa manera, irán incrementando progresivamente la cantidad de ejemplares de la sala a lo largo del tiempo.
Espacio de dibujo.
Es una sala para dibujar y llevarnos al encuentro con las posibilidades individuales y colectivas de dar nuevos sentidos
a la relación entre nuestras cabezas y nuestras manos mediante la expresión de la línea.
Un sistema modular de mobiliario permite diferentes configuraciones para estimular el acto del dibujo para grandes y chicos.
Un conjunto de cajones de luz colgantes construidos con cajas reutilizadas de autopartes y revestidas en papeles de tetra-pak,
definen diversas posiciones en altura a partir de un sistema de poleas sujetadas a las bóvedas del edificio.
Una larga pared se convierte en pizarra colectiva.
La acción inaugural estuvo a cargo de la artista Claudia del Rio quien, a través del Club del Dibujo, ha promovido la acción
del dibujo como un evento de integración colectiva, “una herramienta de pensamiento, placer, comunicación, memoria y auto-conocimiento”.